Para contar cómo se llevó a cabo la investigación denominada Panama Papers y la importancia del trabajo periodístico colaborativo, los periodistas que trabajaron en el caso, brindaron una charla abierta en la Universidad Católica Argentina (UCA).
Con una convocatoria que superó ampliamente las expectativas, Maia Jastreblansky e Iván Ruiz, periodistas del diario La Nación, quienes junto a los colegas Hugo Alconada Mon (La Nación) y Mariel Fitz Patrick (Canal 13) participaron de la investigación de Panamá Papers , disertaron ante más de 200 personas este lunes en la facultad.
Amontonados pero expectantes. Así se encontraba el alumnado ansioso de escuchar la palabra de los especialistas para comprender un poco más sobre “la mayor filtración de la historia”, como afirman la mayoría de los periodistas y coinciden tanto Ruiz como Jastreblansky.
“La filtración fue de 11 millones de documentos, trabajamos con 376 periodistas en casi 80 países, y es 45 veces más grande que Wikileaks. Los mails abarcan desde el período de 1977 hasta el 2015, es decir, 38 años”, especificaron los periodistas del diario La Nación.
El trabajo en equipo -en Argentina La Nación lo hizo junto a su equipo de LN Data y Canal 13-, las presiones internas y externas, el secretismo con el que se llevó a cabo todo –y el riesgo de una eventual filtración–, el complejo desglose de documentos y, en consecuencia, la ineludible implementación de tecnología de avanzada, fueron tan sólo algunos de los factores que consignaron los periodistas al momento de realizar la extenuante investigación en la que se trabajó durante un año entero.
“Los principales hallazgos involucran a 12 líderes mundiales, 128 políticos o ex funcionarios y 29 magnates”, señaló Ruiz y, por su parte, Jastreblansky complementó: “En la página del ICIJ (Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, por sus siglas en inglés) encabeza Mauricio Macri por ser el Presidente en función que aparece como director de una sociedad offshore”.
El jefe de Estado, está involucrado por aparecer como director en la sociedad Fleg Trading Ltd, radicada en Bahamas y a su vez, por otra sociedad offshore llamada Kagemusha. A pesar de la revelación de la sociedad en Bahamas, que le costó a Macri la posterior imputación del fiscal Federico Delgado, los dos periodistas aclararon que el hecho de ser director de una sociedad offshore “no significa un delito en sí mismo” y que, en cambio, sí lo sería la evasión de impuestos o el lavado de dinero.
“En el caso del lavado, sería más complejo aún de probar ya que se tiene que comprobar que el dinero proviene de un circuito de origen ilegal”, explicó Jastreblansky.
Los casos revelados son muchos y salpican de cerca a figuras como el presidente ruso Vladimir Putin, el futbolista Lionel Messi, el primer Ministro británico David Cameron, Mauricio Macri, Sigmundur David Gunnlaugsson, ex primer Ministro de Islandia, algunos ex funcionarios del kirchnerismo, Cristóbal López, y hasta el mismo diario La Nación, tema que ni Iván ni Maia eludieron.
En ese sentido, ambos periodistas aclararon que la sociedad fue publicada el pasado domingo en la edición impresa del diario.
Respecto a la sociedad que involucra a Macri, Ruiz recordó cómo fue el día que descubrió la documentación. “Nos acusaron de querer ocultar la información para que Macri gane las elecciones. Pero la sociedad la descubrí el 7 de diciembre de 2015, cuando ya había sido electo”, apuntó.
Lo cierto es que para llegar al origen del complejo entramado societario no basta con averiguar los nombres de quienes aparecen en las sociedades offshore. “Es una especie de capas de una misma cebolla, pero es muy difícil llegar a esas capas”, aseguró Ruiz a modo de ejemplo para explicar la complejidad del caso.
Y agregó: “Lo que se hace, por ejemplo, es contratar a un estudio de Uruguay para contactarse con una agencia de Panamá para crear una sociedad en Seychelles que a su vez tiene otra sociedad atrás que el dueño de esa sociedad y ese dinero está en Suiza”.
De esta manera, funcionaron algunas de las sociedades que fueron reveladas en la investigación. Quien cumplió un rol esencial en el proceso fue la agencia panameña, Mossack Fonseca encargada de crear sociedades offshore que, en algunos casos, emigraban hacia otros paraísos fiscales. Sin embargo, la agencia se desliga de toda responsabilidad jurídica ya que, según argumentan, ellos desconocen el uso que se le da a esas sociedades.
En medio del revolucionado contexto electoral en el que se llevaba a cabo la investigación, los disertantes relataron lo exhaustivo que resultó el trabajo. Si bien permanece vigente y aún hay muchos documentos por desglosar, la utilización de herramientas tecnológicas tal como el OCR (Optical Character Recognition) –que permite el traspaso de una imagen a texto con caracteres–, así como el Black Light, una especie de google realizado por ingenieros, permitieron que el trabajo colaborativo se agilice.