Surf, skate, natación. Historias de vida de deportistas que tuvieron que buscar nuevas formas de entrenar en casa.
Son las 6 y media de la mañana y Franco Radziunas se levanta para ver por su celular el reporte de olas. Dependiendo del oleaje decide donde ir a surfear; agarra su traje de neopreno, su tabla de surf y se va al mar. Desde el 20 de marzo, solo puede ver el mar desde la pantalla de su televisor y conformarse con entrenar en la pileta de su casa de Mar del Plata y comunicarse con su compañeros y entrenadores por videollamada.
Lo mismo le sucedió a Baustista Galli, skater también marplatense que tuvo que dejar su rutina deportiva y modificarla para la comodidad de su hogar; de levantarse a la mañana temprano y dirigirse con sus amigos al skatepark a buscar nueva formas de entrenar y poder usar su patineta en su casa.
El surfista profesional, Franco explica que a diferencia de otros deportes que capaz pueden entrenar algo similar a lo que hacen habitualmente, “los surfistas no tenemos esa oportunidad pero yo si entreno algo de la parte técnica del surf”. La utilización de una simple colchoneta, dos bidones repletos de agua, y movimientos para estirar su cuerpo, es lo único que necesita Radziunas para seguir mejorando su postura en el surf y mantenerse en movimiento en esta cuarentena.
Franco se conecta todos los días a las 10 am para hacer su entrenamiento diario de surf junto a su entrenador Martín Passeri, ex campeón argentino de surf y actual entrenador del equipo de Honu Beach Mar del Plata, en donde luego también analizan videos de surf. Por la tarde hace la clase de su preparador físico Sergio Magnani con entrenamientos más generalizados no estrictamente de surf.
El skater, Bautista Galli, a diferencia de Franco, está viviendo en una casa con amigos. Dentro de la situación de encierro, tuvieron la idea de crear una rampa de skate en el parque de su casa. Además, explica que “nos llevó varios días construir toda la rampa; pero lo hicimos porque sabíamos que esta situación va a durar bastante y no queríamos perder el contacto con nuestro deporte”.
El surfista Radziunas, también cuenta que utiliza su pileta como instrumento de entrenamiento. Si bien no es exactamente igual a lo que está acostumbrado, ya que él solía tener sesiones de surf de alrededor de 3 horas por día, Radziunas expresa: “Hago un entrenamiento de apnea que sirve para mejorar mi capacidad pulmonar y poder aguantar más tiempo sin respirar debajo del agua, combinandolo con natación”.
“El período de cuarentena nos planteó un gran desafío, dado que el público mayormente se aboca a nuestros entrenamientos por la variedad de ejercicios y las dificultades que solemos agregarles a los mismos, para hacerlos más divertido y desafiantes”, dice Emanuel Volta, preparador físico, creador y responsable de BigTrip Training, compañía encargada de viajes y actividades relacionadas con deportes extremos como surf, skateboard, snowboard, wakeboard, kitesurf, entre otros.
“Dado que no todos cuentan con material de entrenamiento en la casa, buscamos diseñar ejercicios en los que el alumno se vea desafiado a exigir al máximo sus habilidades corporales, en un espacio reducido”, exclama Volta. Además, explica que realizan diferentes ejercicios específicos, sobre los deportes extremos que practican en Big Trip, como colocar solo el cuerpo al piso para practicar distintas variaciones de “pop up” de surf, la utilización de tu tabla de skate para ganar fuerza en las piernas, mover dos banquitos de tu casa para hacer un entrenamiento de miembros superiores, entre otros.
Diego Rebesberger, preparador físico y entrenador de diversos deportes, explica que su intención es la de no perder el contacto con los alumnos y deportistas.“Lo que hago es mantenerme en contacto a diario, organizarle el día desde la mañana hasta que se acuesta, siempre apoyado por un grupo interdisciplinario e indispensable para esta situación particular que estamos viviendo,como nutricionistas, psicólogos y médicos”, comenta el preparador y agrega: “En función del espacio que tienen y los materiales con que cuentan dentro de su casa armamos varios planes de entrenamiento; planes con elemento y sin elemento, utilizando materiales no convencionales. Utilizamos circuitos de fuerza, circuitos aeróbicos y anaeróbicos, plan de movilidad, ejercicios correctivos y preventivos, ejercicios de agilidad mental, un momento para Leer y Juegos de reacción visual”.
Rebesberger también organiza charlas, vía videollamada, con nutricionistas y sus alumnos para que sepan qué comidas acompañan el entrenamiento modificado por la pandemia. Además, suele pedirle a sus jugadores que no duerman la siesta en caso de haberse levantado después de las 10 de la mañana ya que él considera que el descanso es nocturno y no en el día.
Si bien la mayoría de las personas en esta cuarentena están utilizando varias formas de contactarse, lo que más está generando que la gente en sus casas hagan ejercicio son los vivos y videos en Instagram. Volta añade: “Se dictan clases en vivo, utilizando la plataforma digital de Instagram. Cada día, por la mañana, se dicta una clase con un objetivo diferente para realizarse en esa clase respectiva al deporte que estemos trabajando. La clase queda grabada para que también pueda realizarse en diferido”.
A su vez, Volta agrega que desde un plano estrictamente deportivo, “el objetivo es facilitarle al alumno la práctica de los deportes de tabla, acercándole una manera de mejorar y divertirse, cultivando un cuerpo saludable, sano, al tiempo que entrenan físicamente”.
“Lo primero que busco es que se organicen bien el día, mantener una rutina de horarios, no excederse con el ocio”, exclama Rebesberger, a lo que agrega: “Que aprovechen para aprender cosas nuevas, como tocar un instrumento musical, cocinar, entre otras actividades, ya que esta es una situación que nos da la posibilidad de formatearse y mantenerse activos”.
“Además de ejercitarse, hay disfrutar en momento en familia”, afirma el preparador físico.
Por Ana Inés Fernández Monteverde y Valentino Leali
Foto de tapa: Thomas Cervetti (YouTube)
