La obra de la investigadora Laura S. Guic recupera el rol del Consejo Nacional de Educación en torno al Centenario y propone nuevas claves para comprender las políticas educativas. Tiene comentarios del secretario de Educación, Carlos Torrendell.
La Universidad Católica Argentina (UCA) fue sede de la presentación del libro “El gobierno de la educación común. Estudio de las políticas educativas del Consejo Nacional de Educación hacia el Centenario de la Revolución de Mayo”, escrito por la Dra. Laura S. Guic y publicado por la editorial Teseo.
El encuentro tuvo lugar el martes pasado y fue organizado por el Instituto de Historia Argentina y Americana del Departamento de Historia. Participaron docentes, autoridades, estudiantes de la Licenciatura en Historia y el Dr. Carlos Torrendell, comentarista invitado, profesor de la UCA y actual secretario de Educación de la Nación.
Guic, investigadora, y licenciada en Gestión Educativa, especialista, magíster y doctora en Educación, abrió la exposición subrayando que su recorrido académico nació de preguntas profesionales concretas.
“Todos esos títulos no dicen lo primero: yo soy maestra”, afirmó, y recordó que sus interrogantes surgieron años atrás, del trabajo cotidiano en las escuelas. Ese punto de partida la llevó a indagar en el origen de las políticas públicas que dieron forma al sistema educativo argentino.
Debates históricos, metodológicos y políticos
Uno de los ejes del libro es el estudio del Consejo Nacional de Educación, un organismo “poco estudiado” según la autora, cuya relevancia se vuelve central entre 1908 y 1912, cuando es presidido por José María Ramos Mejía. Guic reconstruyó cómo ese ciclo instaló el llamado Programa de Educación Patriótica, con una fuerte impronta ideológica.
Durante la exposición, recordó el impacto del pensamiento de Ramos Mejía, citando de memoria uno de sus pasajes más célebres: “Cuidado con este burgués aureus, en multitud será temible, si la educación nacional no lo modifica con el cepillo de la cultura y la infiltración de otros ideales que lo contengan en su ascensión precipitada al Capitolio”.
La investigadora relató también la dificultad metodológica de abordar un objeto tan complejo, que combina historia política, historia intelectual, pedagogía y análisis de fuentes estatales.
“Tengo que estudiar actas de gobierno, tengo que saber de ciencias políticas, tengo que estudiar leyes”, señaló, aludiendo al uso de actas del Consejo Nacional de Educación, El Monitor de la Educación Común, reglamentos y trayectorias de funcionarios. Su enfoque, explicó, dialoga con corrientes filosóficas y metodológicas contemporáneas, pero siempre evitando imponer categorías actuales sobre procesos del siglo pasado.
La lectura del Dr. Torrendell: hegemonía, diseño y trascendencia
Tras la exposición y frente a quienes serán sus alumnos en los próximos años, el Dr. Carlos Torrendell destacó la importancia del estudio. Señaló que el período analizado muestra “el diseño más completo de lo que podría llamarse una política educativa de esa época” y que el Consejo Nacional de Educación desarrolló una arquitectura de normas, dispositivos e instituciones que moldeó prácticas escolares en todo el país.
También subrayó que se trató de un momento de fuerte centralización estatal: “Uno nota que hay una especie de reiteración de la política educativa argentina que va por el lado de una política educativa hegemónica, con fuerte impronta del Estado nacional”, afirmó, y sostuvo que ese modelo dejó una marca que aún condiciona los debates contemporáneos.
Aunque Torrendell recalcó que habría que ampliarlo no solo a la acción del estado, sino a la interacción con la sociedad civil, celebró el enfoque rizomático empleado por Guic, y señaló que su aporte permite comprender no solo los grandes discursos, sino también “los microdiscursos”, es decir, las prácticas escolares y los dispositivos cotidianos que sostuvieron el proyecto educativo del período.
Además, remarcó que la obra evidencia la función eminentemente política de la educación: un aspecto que ya había anticipado el educador y pedagogo Juan Carlos Tedesco y que, según observó, sigue vigente en la actualidad.
Una obra que ilumina debates actuales
La presentación concluyó con un intercambio entre el público, Guic y Torrendell, marcado por preguntas sobre la relación entre Estado y sociedad civil, el rol de los “letrados” del siglo XIX y los desafíos para pensar políticas educativas plurales en un país que, aunque federal, se encuentra muy centralizado.
En ese sentido, la autora señaló que su investigación abre líneas de continuidad, entre ellas el análisis de cómo estas políticas se articularon, o chocaron, con los consejos provinciales.
El gobierno de la educación común se propone, según Guic, iluminar la trama histórica desde la cual se instauraron modos de gobernar la educación que aún perduran. Su reconstrucción sobre el funcionamiento del Consejo Nacional de Educación, la figura de Ramos Mejía y el Programa de Educación Patriótica permite volver al origen para comprender debates actuales en torno al sistema educativo, su federalización y los alcances del poder estatal.
Una contribución que, como quedó claro en aquella aula, trasciende lo académico y dialoga de manera directa con los desafíos presentes.
