La llegada de la distinción al país celebra el talento culinario local y sirve para fomentar el turismo internacional.
Las estrellas Michelin son el distintivo más prestigioso en la gastronomía mundial, otorgadas por la guia homonima desde su creación en 1900.
A más de 120 años de su origen, la Guía llegó a Argentina y premió a siete restaurantes establecidos en Buenos Aires y Mendoza. El país se suma así a Brasil, la otra nación latinoamericana que cuenta con la presencia de Michelin en las ciudades de San Pablo y Río de Janeiro.
En la premiacion se realizó la primera entrega de dos estrellas Michelin a un restaurante argentino, para Gonzalo Aramburu. Otros establecimientos argentinos también recibieron el reconocimiento de una estrella, entre ellos: Don Julio y Trescha, de Buenos Aires; y Zonda Cocina de Paisaje, Casa Vigil, Brindillas, Azafrán, de Mendoza.
Estrella Michelin: cómo es el proceso de evaluación
Las estrellas Michelin se entregan anualmente. La guía actualiza sus calificaciones cada año, revisando y evaluando los restaurantes y hoteles para asegurarse de que el premio refleja la calidad actual de las experiencias culinarias.
La publicación de la nueva guía, que incluye la asignación o modificación de estrellas, suele hacerse a finales del año o principios del siguiente, dependiendo del país y la región. Las estrellas, otorgadas en base a evaluaciones de inspectores anónimos, son un reconocimiento de alto prestigio que puede catapultar la reputación de un restaurante en la escena gastronómica global.
Estos inspectores anónimos son representados en peliculas y series constantemente, siempre siguiendo pasos metódicos, probando solo ciertos platos del menú, y hasta tendiendo trampas para poner a prueba la atención del staff.
Anécdotas sobre estos inspectores relatan que muchas veces dejan caer cubiertos (para ver con qué velocidad son reemplazados), tienen restricciones alérgicas particulares, y piden combinaciones de platos muy particulares.
Los mismos restaurantes capacitan a sus empleados para reconocerlos en base a rutinas o procesos que deben seguir de acuerdo a la Guía. Incluso, muchos de estos inspectores se vuelven conocidos, y los restaurantes, en el despacho, cuentan con fotos de ellos para memorizar sus caras y poder reconocerlos apenas entran al establecimiento.
Para recibir una estrella Michelin, el establecimiento no solo debe contar con una gastronomía de otro nivel, una limpieza y un orden extremo, y una atenció al cliente impecable, deben ir más alla.
Lo que caracteriza a restaurantes que han recibido este galardón, es su capacidad para lograr veladas inolvidables para todos sus comensales. Como la misma guía establece: un restaurante con una estrella Michelin vale la pena un desvío, y uno con tres amerita un viaje de destino como lugar central.
Las primeras argentinas en ganar la Estrella Michelin
Años atrás, en la premiación del 2021, la primera argentina galardonada con una estrella fue Carito Lourenco, en su restaurante Fierro, localizado en Valencia. Y años después, en abril de 2023, en la premiación europea, otra mujer argentina volvió a aparecer en el guia.
Esta vez fue Florencia Montes, quien recibió una estrella Michelin por su restaurante Onice ubicado en la Costa Azul francesa. Lourenço y Carrizo abrieron Fierro en 2015 con una innovadora propuesta de una sola mesa para 12 comensales.
Adaptándose a los desafíos de la pandemia, mantuvieron la esencia del restaurante, recibiendo su primera estrella Michelin en 2021. “Ha sido muy bonito poder inspirar a muchas mujeres que aspiran a posicionarse en un terreno mayoritariamente masculino”, comenta Carito.
Florencia Montes, nacida en La Plata, Argentina, recibió una estrella Michelin a solo 9 meses de la apertura de su restaurante Onice en Niza, Francia. Montes emigró a Francia en 2014 con una visa Working Holiday y, tras años de esfuerzo y aprendizaje, ha logrado posicionarse en la élite de la gastronomía mundial.