La situación del sector en pos de un mundo paralizado por la pandemia

Cierres y aperturas de fronteras, aerolíneas que abandonan sectores del mapa, hoteles que sólo sirven para hospedar a pacientes con COVID, y numerosos protocolos presentados para poder reactivar un sector fuertemente golpeado por la pandemia. 

“800 millones de turistas menos” es el número que se estima para finales del 2020, según la experta en innovación y transformación de la Organización Mundial del Turismo (OMT), Natalia Bayona. Lo que se traduce en una pérdida de entre US$300.000 millones y US$435.000 millones en todo el mundo con respecto al año anterior. 

Así mismo, debido a las diferentes restricciones que se fueron aplicando a lo largo de los últimos seis meses, y según un artículo presentado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el sector supone la caída de entre el 1,5% y el 4,2% del PBI mundial. Y se consideran a República Dominicana, Ecuador, México, Colombia y Argentina como los países más afectados en América Latina, y a España entre los europeos.

Ser parte de este grupo es algo que lamenta cada parte del sector turístico de nuestro país, el cual enfrenta una situación completamente distinta y negativa a lo que fue el 2019, donde se cerró el año con una cifra récord recibiendo más de 7,5 millones de turistas internacionales, según lo había anunciado el secretario de Turismo de la Nación, Gustavo Santos, en declaraciones al diario Clarín, tras concluir la Feria Internacional de Turismo (FIT) 2019.

En este caso, nuestro país ha recibido de enero a junio del 2020, solo 2,0 millones de turistas no residentes, viendo así un decrecimiento del 45,1% con respecto al mismo periodo del año anterior. Teniendo en cuenta que desde abril, hasta por lo menos junio, el ingreso de turistas al país ha sido completamente nulo, según el Informe de estimaciones del turismo internacional, realizado por la Subsecretaría de Desarrollo Estratégico de la Nación.

Por lo tanto, estamos hablando de un país que continúa con sus puertas cerradas al mundo, mientras que el mundo, por ejemplo, miembros de la Unión Europea, han reactivado la actividad el 1° de julio pasado.

“Cuando se decretó la cuarentena, la situación era demasiado caótica. Ningún pasajero comprendía que estaba pasando realmente y cómo iban a desenvolverse sus viajes previstos, y desde mi lugar como agente de viajes tampoco estaban claras las respuestas ante sus dudas ya que los diferentes operadores (aerolíneas, hoteles, excursiones, etc) seguían sin tener definidos los procedimientos para este escenario tan extraordinario”, explicó Sol Angio del departamento de Ventas de la Agencia de viajes, Al Mundo. 

Desde aquel 20 de marzo, cuando todo se paró, el sector quedó inundado de faltas de respuestas, incertidumbres y preocupaciones, tanto para el cliente, pero quizá aún más para los protagonistas del sector, como agentes de viajes, departamentos de turismo, y empresas que dependen de la rama. Todo lo que le siguió en los próximos 6 meses, no fue muy distinto al principio. 

Mientras los días, semanas y meses pasaban, la cuarentena se mantenía estricta y la situación no mejoraba, sino todo lo contrario.

Aerolíneas como Air New Zealand, Qatar Airways y Emirates, que antes de la pandemia tenían rutas que unían sus países con la Argentina anunciaron que no las retomarían una vez que finalizaran las medidas de restricciones a los vuelos.

Latam, también anunció su salida del mercado local, luego de 15 años de operación en el mercado doméstico y con más de 1700 empleados en nuestro país.

Mientras que según Statista, México es la más vulnerable de las economías más grandes del mundo, ya que el 15,5% de su PBI depende de la industria de viajes y turismo, en nuestro país el 10% del PBI también depende de este sector. Por lo que es indispensable mantenerlo en funcionamiento, y de lo contrario, el golpe sería, y es actualmente entonces, muy grande. 

“La situación en Bariloche desde hace 6 meses, desde el inicio de la pandemia es muy preocupante, te diria que ya es insostenible, desde marzo hasta fines de agosto se dejaron de facturar 9.500 millones de pesos desde el sector privado, no hemos tenido turistas, Bariloche es una ciudad que el 70% de su población vive de turistas directa o indirectamente”, nos comentó Gaston Burlon, Secretario de Turismo de Bariloche. 

Lamentablemente, no solo los ciudadanos de Bariloche, deben su estabilidad económica al turismo, sino que este es el principal generador de empleo en Argentina, con 13,1 puestos de trabajo por cada millón de dólares que se invierte, según señala el documento difundido en la Feria Internacional de Equipamiento, Productos y Servicios para la Gastronomía y Hotelería (Hotelga) 2019. 

Con respecto a esto, podemos saber que al igual que en otros rubros durante esta pandemia, muchas son las personas que no lograron conservar su empleo. 

Este es el caso de Al Mundo, que redujo el personal aproximadamente un 60%. “No se por ejemplo mi puesto era de ventas, claramente ahora es posventa, no se está vendiendo nada, había muchas devoluciones, yo estuve de licencia cuatro meses, mi equipo eran nueve, quedaron tres fijos y ahora me reincorporé yo , pero dos ya fueron desvinculados y otros tres están a la espera”, expresó Sol Angio.

Pero la necesidad, y el ingenio humano llevaron a que empresas como Turismo City, un comparador de vuelos baratos para facilitar el acceso de los usuarios, reconvirtiera su trabajo y especialidad, para no tener que lamentar pérdidas de personal. “Lo que hicimos nosotros fue convertirnos en una empresa que vende servicios a otras empresas, desde desarrollo de software, hasta diseño y marketing, y bueno, eso nos permitió mantener al equipo, no bajar sueldos ni nada de eso”, nos contó Julian Gurfinkiel, co-fundador de Turismo city.

Ante la clara necesidad, el gobierno también debió mantenerse activo con sus decisiones, y en este caso se tomaron distintas medidas para conservar y ayudar al sector. Dando lugar de esta forma a la Ley de Sostenimiento y Reactivación del Turismo, la cual se promulgó en el Boletín oficial el 21 de septiembre, y que tiene como objetivo “la implementación de medidas para el sostenimiento y reactivación productiva de la actividad turística nacional, por el término de 180 días, prorrogable por el mismo plazo por el Poder Ejecutivo”.

Por su parte, desde el Ministerio de Turismo de la Nación, que encabeza Matías Lammens, también se diseñaron varios programas de apoyo exclusivo para las agencias de turismo. 

Por ejemplo, desde octubre comenzará a funcionar un Fondo de Auxilio y Capacitación Turística (FACT) que tiene como objetivo preservar a las mipymes del sector. El beneficio consiste en la entrega de un salario mínimo, vital y móvil por empleado de cada una de estas empresas por mes, durante los próximos seis meses. Será un complemento del pago del ATP y alcanzará a unos 42.000 trabajadores de unas 2.700 empresas distribuidas en todas las provincias.

Para dar un poco de calma y alegría al sector, el pasado 18 de agosto, desde el Ministerio de Turismo afirmaron que se podrá llevar adelante la temporada de verano en el país y junto con esto deberán aplicarse diversos protocolos elaborados para la gastronomía, hotelería y agencias de viajes. 

“Lo importante es practicar la responsabilidad individual para no generar daños en la responsabilidad colectiva”, explicó Yanina Martínez, secretaria de Promoción Turística.

Frente a esto, desde Villa Gesell, ciudad balnearia de la provincia de Buenos Aires, el intendente Gustavo Barrera y el Secretario de Turismo, Emiliano Felice, presentaron un Plan de Calidad Sanitaria para las playas públicas y una app para celulares donde los turistas podrán verificar durante la temporada de verano qué playas están disponibles y cuáles ya alcanzaron el cupo de ocupación máximo.

Las medidas que se pondrán en práctica tienen que ver con el distanciamiento interpersonal tanto dentro como fuera del agua, distanciamiento entre instalación de sombrillas, uso de calzado y barbijo en el ingreso a la playa.

Así también, los balnearios de Mar del Plata presentaron su propio protocolo donde se propuso que no se modifiquen sus estructuras, y que el número de carpas y sombrillas sea la misma, pero que sí cambie la cantidad de ocupantes. Se estima que haya piscina, vestuario y ducha, pistolas de temperatura, distanciamiento social y barbijos. 

En cuanto al Operativo de Seguridad en Playas, se contará con drones para el control de la densidad ocupacional e informarán mediante intercomunicación sobre su estado.

Si bien el ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Daniel Gollan, consideró imposible imaginar una masiva llegada de turistas en la costa atlántica hasta que no haya una vacuna contra el coronavirus, el Ministro de Turismo y Deportes de la Nación, confirmó en declaraciones a Radio Diez, que el Gobierno tiene la “firme voluntad y convicción” de que haya temporada de verano. Esto debido  a lo que significa para muchas ciudades de la Costa y del Sur que viven de esta actividad. 

Esto mismo fue ratificado por el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, el pasado 21 de septiembre. “Temporada va a haber” y el objetivo es “tener la mejor posible”, declaró durante un acto realizado en la ciudad de Chascomús, donde anunció la creación del Fondo Municipal para la Reactivación Cultural y Turística, de 300 millones de pesos.

Pese a estas buenas noticias para el sector, lo anunciado no parece suficiente. “Nos parece excelente el anuncio de que se podría tener una temporada de verano, pero Bariloche no llega a la temporada de verano. Tenemos que tratar de reactivar antes, algo, no masivamente, pero si de a poco, hicimos un plan de reapertura turística para poder empezar a hacer girar la rueda porque sino la crisis social en bariloche va a ser tan grande que creo que no se tiene noción de esto, creo que hay que buscar un equilibrio entre la economía y la salud, priorizando la salud, pero de a poco tenemos que ir saliendo porque no podemos estar hasta que aparezca la vacuna, que nadie sabe cuando va  a ser, encerrados, sin trabajar, esa es la realidad de bariloche.”, expresó el Secretario de Turismo de Bariloche.

Las pérdidas del sector son enormes, y si bien día tras día se toman decisiones para poder reactivarlo, la recuperación total y la vuelta a la normalidad, lamentablemente se encuentran muy al fondo del camino.

La celebración de este día tiene el objetivo de fomentar la sensibilización entre la comunidad internacional respecto a la importancia del turismo y su valor social, cultural, político y económico, y debido a la necesidad del sector en este año tan particular, debería ser bien considerado por todos.