Las tres principales dificultades que tiene llegar a ser piloto profesional de carreras además del talento natural son el dinero, cultivar una mentalidad ganadora y la calidad de gente que acompañe en los primeros pasos resulta clave para llegar a la cima.
Para formarse como piloto profesional todos pasan por la disciplina del automovilismo llamada Karting, salvo excepciones como Agustín Canapino, tetracampeón del Turismo Carretera, que directamente no se subió a un Karting porque su padre le negaba ser piloto por miedo a que no llegara y gastara mucho dinero, tiempo y se frustrase por no conseguirlo.
Facundo Della Motta, sanjuanino campeón del TC 2000 en 2014 entre otros títulos sostiene que en este deporte se necesita más que talento natural. “Dependés en tus primeros pasos de la gente que te acompañe, qué tanto sepan tomar decisiones tanto en lo económico cómo en la elección del grupo humano que trabaja en el elemento, ya sea el Karting, la Fórmula o los primeros pasos en el Automovilismo, es lo que te determina para ir hacia adelante”, afirmó Della Motta.
Según Franco Morillo, juninense campeón de la Copa Bora en 2016, la clave está en prepararse bien físicamente. “le dedico 2 horas por día a la mañana temprano y después por la noche. Por la mañana lo que es la parte aeróbica y entrenamiento y a la noche simulador”, comenta.
“La etiqueta de promesa por el contrario de llenarme de miedos y dudas, es algo que en su momento cuando me tocó a mí fue motivador y si no lo tenés andas deseando que lo seas, si sos muy ambicioso y fuerte mentalmente como yo”, sentenció Della Motta. El campeón del TC 2000 de 2014 se refirió a que cuando sos chico “necesitás que te valoren lo que estas haciendo para saber que estás por el buen camino para ser un gran campeón en este deporte”.
Para aprender a pilotar estos coches a 246 km/h y realizar adelantamientos extremos se requiere no sólo del talento natural del piloto, sino que también se va aprendiendo con la práctica. Formarse cómo base en el Karting, pero también se necesita estar bien rodeados. Della Motta señaló: “En mi caso fue mi padre que me rodeó en cuanto al medio mecánico y a las personas que te arman ese medio mecánico, pero creo que todo se va aprendiendo en base a la práctica y a la experiencia, y al nivel de competencia eso es muy importante, ya que no es lo mismo competir en mi caso en San Juan, que en Argentina, en Sudamérica, o en Europa”.
También los pilotos destacan que se necesita tener ambición, mentalidad fuerte, buena alimentación, ayuda psicológica con especialistas, preparadores físicos, entre otras cosas. Della Motta indicó: “Todo eso, sumado a tener buenos sponsors, dinero y a una gran cuota de suerte, creo que es excepto algunas excepciones, el promedio se necesita ser más rápido abajo del auto que arriba del auto para poder lograr ser profesional”.
Y dejó entrever que “a pesar de ser muy rápido con el coche, si no tenés esa gran cuota de suerte más dinero y sponsors no llegás a ser un gran campeón de este deporte”.
El trabajo psicológico, clave
La importancia del trabajo psicológico en los deportistas por medio de psicólogos deportivos es fundamental para favorecer y mejorar el rendimiento deportivo al máximo. Melina Ottonelli, psicóloga clínica y deportiva, explicó: “Se consigue mejorar el rendimiento deportivo trabajando en los cuatro pilares que lo componen: lo físico, lo técnico, lo táctico y lo psicológico. Claramente un psicólogo no se ocupará de los tres primeros, pero sí podrá trabajar en la interacción e integración de los mismos”.
Y añadió: “Trabajo en las distintas variables cómo son la motivación, atención, confianza y tolerancia a la frustración pero siempre con el objetivo de cuidar la salud integral del deportista, atendiendo a lo psicológico donde considero la dimensión conductual, emocional, social y cognitiva. Al mismo tiempo, respetando e integrando las demandas desde lo físico, es decir, considerando la salud de la persona en todas sus dimensiones”.
Desde Psicología Mentalite, página de Instagram de psicólogos deportivos, destacan que “la Psicología del deporte puede ayudar a un deportista a que reorganice su sistema de creencias”. “Con esto puede asimilar su entorno como menos amenazante y más desafiante. Tomar el control de lo que está viviendo y de cómo enfrenta la competencia”, afirmó José Laurido, psicólogo deportivo y parte del equipo de Psicología Mentalite en Instagram.
Para proteger al deportista, que no es fuerte mentalmente, del “qué dirán” Laurido dice: “El deportista debe cuidarse de los factores externos que puedan afectar a su rendimiento deportivo. Para eso es importante que ponga foco en su proceso de entrenamiento y competición, teniendo una buena comunicación con su entrenador y dejando claro cuáles son las expectativas que el deportista tiene con su entrenador y con él mismo”.
“Es ideal contar con un equipo multidisciplinario que se comunique constantemente mediante reuniones. La planificación del entrenamiento debe contemplar las actividades del equipo que está detrás del deportista”, aseguró Laurido.
¿Y la alimentación?
La alimentación es otra parte fundamental para que un deportista consiga mejorar y alcanzar su máximo rendimiento deportivo. “Esta alimentación debe cubrir todo lo que la persona necesite, es decir, toda la energía que el ser humano precisa para sus actividades del día, para que funcione su estructura básica, su órgano, sus distintos sistemas y además para lo que él va a utilizar adicional a su entrenamiento”, explicó Mauricio Ríos, nutricionista deportivo.
Y agregó: “Desde esta base es muy importante cubrir no tan sólo las calorías que este deportista de alta exigencia necesite, sino que también cubrir lo que esta persona precise de cubrir en los distintos macronutrientes, es decir carbohidratos, proteínas y grasas, y además micronutrientes que son claves para el buen funcionamiento de su organismo y de la actividad celular cómo tal”.
Además de una sólida alimentación se necesita de una buena hidratación para alcanzar el máximo rendimiento deportivo. “Cuando nosotros tenemos pérdidas de agua que son considerables, es decir, pérdidas que son sobre el 2% del peso corporal de la persona, ya va a interferir con su capacidad cardiovascular y eso puede repercutir en el rendimiento, por lo tanto una adecuada hidratación que devuelva la cantidad de agua que estoy perdiendo a través del sudor y devuelva electrolitos cómo el sodio, el potasio, el cloro que se pierden a través del sudor es fundamental, y para eso hay que tener en consideración que hay que hidratarse de forma constante durante el día en reducidas cantidades por cada vez”, sentenció Ríos.
A su vez, el especialista destaca que “la alimentación en un deportista siempre debe ser variada y equilibrada, tanto en calidad cómo en cantidad”.
“Por lo tanto debe incorporar alimentos del grupo importante cómo son los cereales, alimentos del grupo de las proteínas tanto proteínas de origen animal cómo de origen vegetal. También debe incorporar los alimentos que tienen cómo base las grasas, grasas que son de buena calidad principalmente grasas de origen vegetal, y en menor proporción aquellas que son de origen animal“, concluyó.
Foto de tapa: Diario El Zonda