En la Universidad Católica Argentina, cuatro muestras integran la exposición “Rostros y Voces de la Deuda Social”, un recorrido en imágenes cuyos protagonistas son jóvenes, ancianos, personas carentes de recursos y niños.
Por Marina Vanni y Agustina Alessandroni
En un rincón del Pabellón de Bellas Artes llaman la atención las cámaras Kodak descartables puestas sobre una mesa, algunas incluso cargadas con rollo. Las mismas cámaras aparecen en gigantografías en la pared, que muestran a chicos en edad escolar experimentando con ellas.
Sus testimonios visuales son parte de la muestra “Hábitat, familia y escuela en la lente de las infancias rurales”. A los niños que participaron del proyecto se les pidió que fotografiasen aquellos aspectos de su cotidianeidad que quisieran compartir con otros. Sus “disparos” relatan escenas de lo más variadas: hay capturas de la capilla del pueblo, del paisaje desértico y desolado del norte argentino, de otros chicos posando con sus perros, estudiando o dibujando.
La segunda propuesta, titulada “Juventudes”, presenta una fila de retratos acompañados de epígrafes. Estos exponen las ideas del entrevistado respecto al trabajo y al estudio. Las desigualdades que hay entre los protagonistas se manifiestan tanto en sus palabras como en el entorno que los rodea. Así, un muchacho de 29 años de Capital Federal cuenta, desde el banco de una plaza, el maltrato que recibe por estar en situación de calle. Al lado, una estudiante de 25 años de San Fernando, rodeada de libros, explica que planea seguir capacitándose.
Al fondo de un largo pasillo se ubica la tercera muestra, “Trabajo en los márgenes”. Las capturas en blanco y negro relatan el quehacer diario de distintos trabajadores informales: manteros, cartoneros, “chipaceros”, recicladores. La lente de Francisco Gilges no se perdió de ningún detalle: el cartonero aparece revolviendo la basura en una ciudad impecable y la recicladora se pierde entre todo tipo de objetos desordenados, desde partes de lavarropas hasta ruedas.
Por último, primeros planos de personas de tercera edad, a todo color sobre fondo negro, dominan las paredes del salón. Estos forman parte de la exhibición “Fisonomía de las personas mayores”. Algunos de los ancianos aparecen sonriendo, en pareja; otros más serios miran con sus anteojos directo al objetivo del artista Diego Epstein. Las imágenes restantes, más espontáneas, acromáticas y ambientadas en exteriores, fueron tomadas por Marta Ferré.
Esta iniciativa artística fue organizada por el Observatorio de la Deuda Social Argentina, un espacio de investigación perteneciente a la Universidad Católica Argentina. Desde 2002 se dedica a estudiar los alcances de la pobreza y la desigualdad en el país a través de herramientas como encuestas en hogares, además de encargarse de relevar las conclusiones obtenidas.
La exposición estará abierta del 14 de agosto al 13 de septiembre, de martes a domingo de 11 a 19. La entrada es gratuita y el ingreso es por Av. Alicia M. de Justo 1300, PB, Campus Puerto Madero de la UCA.