Buenos Aires se destaca por sus altos edificios y calles repletas de gente. Quién hubiera dicho que a solo 30 minutos de la city porteña se encuentran grandes parques de ski acuático abiertos al público. Los espacios ideales para escapar del estrés de la ciudad y respirar aire fresco junto al agua.
Este deporte extremo, que consiste en deslizarse sobre el agua con una tabla colgándose de un cable eléctrico, crece a nivel mundial y nacional. Es reconocido por ser el deporte que combina exigencia física, naturaleza y diversión. Dentro de los más reconocidos, están: Hudson Park (en Guillermo Hudson), Bairex Park (Benavidez) y Pampa Cable Park (Zárate).
Este año, se expandió a tal nivel en Buenos Aires que más de diez parques abrieron sus puertas al público. Da la casualidad que esto empezó a suceder luego de que el Mundial de Wakeboard, en el que participaron 27 países y más de 130 atletas, eligiera como sede a la Argentina. Esto sucedió del 19 al 24 de marzo en el municipio bonaerense de Escobar, y contó con la presencia de destacados esquiadores acuáticos a nivel mundial como Massi Piffaretti, Cory Teunissen, Nic Rapa y Shota Tezuka.
Negocios inmobiliarios y deporte
Enrique Etchebarne, el promotor inmobiliario que movilizó inversiones por más de US$ 50 millones tanto en Buenos Aires como en Punta del Este, sostiene que contar con diferentes obras que impulsen la actividad y la socialización son clave para el desarrollo. Luego de tener un éxito sobresaliente con sus proyectos como por ejemplo con Laguna Escondida y Delamar, el empresario decidió ampliar su espectro al rubro del deporte y está construyendo un parque de Wakeboard en el kilómetro 55,5 ramal pilar con acceso directo desde la Panamericana.
“Es un terreno con una laguna y decidimos armar un parque de wakeboard y otros deportes para lograr un polo gastronómico y deportivo en el área de pilar”, explicó Etchebarne y agregó: “Estamos proyectando viviendas para ofrecer una experiencia completa de alojamiento y deporte en el mismo sector”. El empresario busca aprovechar el crecimiento exponencial de este deporte con su trayectoria en el negocio inmobiliario.
Etchebarne considera que el wakeboard es un deporte que sin duda crece día a día, que atrae gente nueva constantemente y es por eso que prácticamente tiene el éxito asegurado. “Es fácil de aprender,es apto para todas las edades y genera alrededor del deporte un ambiente inclusivo y muy atractivo”, dijo.
Maximiliano Perez Wertheim, competidor de wakeboard en disciplina de cable desde 2014, premiado con un primer puesto copa Luján de invierno 2017, segundo puesto en torneo Rip Cul de verano 2017 y rankeado noveno a nivel nacional comentó que el wakeboard tiene dos disciplinas: en lancha y en cable. El deporte que se realiza con lancha, consiste en que el atleta combine trucos usando la ola de la estela de la lancha como rampa y realice 8 trucos por pasada. Y en cable, se trata de un cable circular que en vez de usar una lancha, utiliza cinco torres unidas por un cable con poleas al cual lo impulsa un motor que tiene agarrado un manillar. De ahí se cuelga el atleta y elige qué módulo utilizar dependiendo de lo que quiera hacer. Esta última disciplina, tiene por objetivo realizar la mayor cantidad de trucos en los módulos que se presentan a lo largo del cable circular. Existen diferentes tipos de módulos, entre ellos se destacan las barandas, rampas y cajones y sus diferentes bifurcaciones.
Perez Wertheim, piensa que el aumento del público que practica este deporte tiene más que ver con la manera en la que se difunden las cosas en la época en la que vivimos que con alguna característica específica del deporte en sí. “Mucho tiene que ver las redes sociales”, señala el wakeboarder, “tiene una gran difusión a la vida social que se lleva en los diferentes lugares donde se practica este deporte”. También comentó que hay mucha gente que le encanta realizar deportes extremos como el ski y el snowboard, y esta es la modalidad que más se le parece dentro de las posibilidades que existen viviendo en una ciudad. “Yo encuentro en este deporte, un gran reemplazo para calmar mis ansias”, agregó.
Salud y riesgos
El esquí acuático sobre tabla no solo es exótico y entretenido sino que, como la mayoría de los deportes, también tiene una serie de beneficios para la salud y el bienestar. Lourdes García, una periodista especializada en belleza y ejercicio que hizo un estudio con respecto a esto, destaca varios. Entre ellos, mejora la musculatura general del cuerpo ya que es un ejercicio completo porque requiere un trabajo constante tanto para no caerse como para realizar las diferentes maniobras que le caracterizan. Además, se estima que se pueden llegar a quemar unas 500 calorías con cada sesión de wakeboard que tiene una duración de 20 minutos. También fortalece el sentido del equilibrio, potencia los reflejos y la concentración y ayuda a aumentar la coordinación motora y la flexibilidad. Y por último, genera sensación de bienestar al ser practicado en espacios naturales abiertos.
A pesar de los beneficios para la salud el wakeboard también tiene una serie de riesgos que se deben tener en cuenta antes de realizarlo. Dentro de ellos, los golpes que se pueden recibir contra el agua. Bajo ninguna circunstancia deben practicarlo mujeres embarazadas o personas que padecen osteoporosis ni hemofílicos. Además de personas en período de recuperación de lesiones musculares, tendinosas, óseas, sin la pertinente aprobación del médico especialista que lo esté tratando.