Sensible pero fuerte y decidido, Facundo Castaño Montoya (29), integra la banda El Zar junto a Pablo Giménez y no va a parar hasta alcanzar su sueño: llegar a ser una banda reconocida, con los desafíos que esto conlleva. Sin embargo el integrante no está muy lejos. El grupo fue convocado en 2018 para tocar en el festival de música más reconocido en el mundo en su versión argentina: el Lollapalooza.
“Nos queda un montón de camino. Ahora nos conoce bocha de gente pero es gradual viste. Para mi siempre se puede un poco más. Aparte es un camino muy largo el de la industria musical en Argentina”, afirma Montoya.
Con dos discos y varios shows en Niceto, Facudo habló con Punto Convergente sobre cómo fueron los inicios de la banda y su posición frente a la música.
¿Cómo empezó la idea de una banda?
Arrancamos en 2015, con un plan más acústico. Eramos Pablito y yo que habíamos salido de una banda que se llamaba Son y Serán. Nosotros ya eramos amigos y esa era una banda medio “en joda”. Onda, juntada de amigos, tocar y divertirse. Nos surgió la idea de armar algo por separado porque teníamos mucha música en común que nos gustaba.
¿Vos solamente cantás o también tocás?
Yo siempre fui violero. Estudié guitarra en el conservatorio y canto desde los 16 años pero la voz era un instrumento secundario. Hoy en día creo que es el principal. Siempre toqué desde que tengo 10 años. Estudiaba guitarra y armónica.
¿Alguna vez te imaginaste en una banda?
El flash era como tocar tal vez, llegar un poco era el sueño. Pero a veces te pasa que lo tenés al sueño pero sentís que es medio difícil de realizar y lo ves un poco lejano. Después, a medida que vas haciendo cosas, se hace más corto.
¿Te considerás el líder de la banda?
No, es una sociedad. Es todo recontra equitativo. Tener una dupla de laburo está bueno y en algún punto la otra persona te da lo que vos necesitás y viceversa. Por eso, esta bueno laburar en conjunto. Pablito tal vez tiene una mente más exacta, más precisa. Yo soy más un volado. Es ingeniero aparte de músico así que te imaginarás que es una persona muy concreta y muy prolija. Creo que es la combinación perfecta.
¿Qué artista fue siempre tu inspiración?
Todos. Creo que mucho rock nacional, mucho (Gustavo) Cerati y mucho de afuera también. Siempre me gustó mucho Paul (Mccartney), (George) Harrison y Radiohead. De los Rolling me gusta mas su época posterior a los 90’.
¿Quién fue tu inspiración a nivel personal?
Mi tío. Siempre tuvimos una conexión fuerte y siempre fue el más bohemio de mi familia. Mis viejos y mi hermana creo que tambien un poco,a los dos siempre les gustó mucho la música. Mi viejo nos levantaba con El Flaco (dice, entre risis, sobre Luis Alberto Spinetta).
¿Qué música escuchás más?
Últimamente estoy muy nacionalero. Escucho mucho a bandas emergentes y a (Andrés) Calamaro siempre.
¿Te definís como una persona sensible?
Sí obvio, re. Creo que todo el mundo es sensible el tema es explotarlo. La música es un gran porcentaje de la vida de uno. Hay gente igual que no escucha música y está perfecto. Me parece una locura pero cada uno con su flash. Imaginarme la vida sin música es, no sé.
¿Y cómo definirías la música del Zar?
Hoy en día poner géneros es medio raro, ya la música no tiene tanto género salvo que seas banda de metal o de reggae. Y lo mechamos con un poco de electrónica. Lo que hacemos nosotros, más que nada, es hacer música popular.
¿Quién de los dos compone?
Es muy simbiótico la verdad, a veces partimos de alguna idea que trae el y yo pongo la melodía o viceversa. Muchas veces alguno ya viene con una idea de letra y la laburamos entre los dos.
¿Cómo te inspirás?
Sin duda, escuchar mucha música o leer. Creo que las influencias de las personas también te sirven, salirte un poco de tu lugar y mirar todo desde una perspectiva de afuera esta bueno. Muchas veces parte de una idea o de decir lo que te pasa, va variando. Otras, sale desde un beat, de una armonía que me copa y ahí le pongo una melodía.
¿Te pasa de tener qué componer y que no te salga ninguna idea?
Obvio como todo, sobre todo con las cosas más de carácter sensible e inspiracional: hay semanas que estas re bien muy ocurrente y hay semanas que no te sale nada. Decís ‘¿qué hago’. Por eso es muy cambiante y a diferencia de otras profesiones, las artísticas juegan mucho con como estas vos.
¿Qué significa tener una banda hoy? Con las redes sociales, ¿es más fácil más difícil?
Un poco y un poco. Vivimos igual en un país y una ciudad particularmente que tiene mucho impulso a nivel cultura. Hay mucha gente haciendo cosas y si te gusta un generó hay una gran oferta cultural y eso hace que se eleve la vara de exigencia de cada uno. Eso en algún punto esta buenisimo.
Hoy en día pasa todo por las redes sociales. Nosotros manejamos la cuenta de Instagram, a veces más yo incluso (risas). Hay que ponerle mucho empeño a eso también.
¿Dónde suelen ser sus shows?
En el circuito de acá casi todos los lugares aunque son pocos en los que están buenos para tocar. No tienen buena disposición, siguen siendo arreglos rarísimos o no tan buenos entonces por eso creo que las bandas terminan tocando en los mismos lugares de siempre. Donde más me gusta tocar es en Niceto o La tangente.
¿Qué pasó con la convocatoria a tocar en el Lollapalooza 2018?
No tocamos al final (se ríe) porque fue el día que se suspendió por lluvia. Pero hubiese estado bueno. Cuando nos enteramos no lo podíamos creer. Si bien a los artistas no nos pagan mucho, y de hecho te sacan derechos de autor, para la difusión esta buenísimo, es súper provechoso y por eso firmamos el contrato.
¿La música para vos representa un trabajo?
Sí, es cero hobby. Yo laburo de músico. Me gusta, es lo que sé hacer y además es lo que me hace feliz.
¿Siempre supiste que querías ser músico?
Siempre tuve las ganas y la añoranza de hacerlo después lo vas viendo más posible porque lo vas concretando. A medida que vas haciendo el camino hay nuevos desafíos.
Es difícil llegar a donde están ustedes… ¿Alguna vez te lo pusiste a pensar?
Sí, igual nos queda un montón de camino..ahora nos conoce bocha de gente pero es gradual viste. Para mí siempre se puede un poco más. Aparte es un camino muy largo el de la industria musical en Argentina.
¿En dónde te ves en un tiempo?
Acá como siempre, sacando nuevos discos, nuevas canciones. Seguir laburando, que crezca todo el proyecto.
¿Te gustaría tocar afuera?
Sí, obvio. Estamos armando giras. Tenemos el plan de viajar a México y a Chile el año que viene.