“Es una muestra de una artista que tiene una discapacidad, no de una discapacitada que quiere ser artista”, dice con énfasis Marcial Sarrias, arquitecto y curador apasionado por el arte, que toca puertas hasta el cansancio con el objetivo de difundir el trabajo de artistas jóvenes. Con esa frase, marca lo que él llama el “concepto fundamental de la muestra”.
“A cuerpo abierto” es el nombre de la exposición de dibujos y pinturas de Cinthia Rched, artista que se crió en Resistencia, Chaco y en la actualidad vive en Buenos Aires. Sarrias es el curador que impulsó y dio forma a la muestra: un recorrido no cronológico de la obra de Rched, a través de nueve vidrieras que se expone en el Pabellón de las Bellas Artes de la Universidad Católica Argentina (UCA).
Sarrias anticipa, al mismo tiempo, que “algunos críticos han apoyado la descripción de la muestra más en la discapacidad que en el resultado final”. Lo dice haciendo referencia a los textos que aparecen junto a las obras y en el catálogo, marcando con convicción su forma de ver la exposición de las obras de Rched.
Y explica: “No es el caso de una retrospectiva. A Cinthia le falta muchísimo para su techo, pero quisimos mostrarla en todos sus aspectos”.
En la muestra, que comenzó el 15 de agosto, se pueden ver con claridad varias “facetas”, divididas en las diferentes partes de la muestra: dibujos en papel hechos con diferentes materiales (lo que haya a mano), una serie de autorretratos que corresponden a un período de su vida en el que atravesó problemas de salud y una serie de operaciones, pinturas de flores cargadas de color, paisajes de Argentina y el mundo y retratos de amigos y personas cercanas.
La directora del Pabellón de Bellas Artes de la UCA, Cecilia Cavanagh, lo resume así: “El dolor de su cuerpo, la alegría del compartir con sus amigos, en inconfundible expresionismo cargado de materia de sus flores, su incansable andar por el mundo pintando paisajes in situ, culminando con sus notables dibujos casi museísticos”.
Desde la primera impresión, es fácil reconocer el estilo de Cinthia. Algunos cuadernos de dibujo abiertos, dos pinturas y una foto de la artista, en la que está portando un bastón. “Es figurativa, porque fácilmente uno puede reconocer lo que está pintando”, explica Sarrias y añade: “A su vez tiene un sello expresionista y su pintura se caracteriza por la utilización de mucho material”.
En el texto que acompaña la primera de las vidrieras, el artista Eduardo Stupía revela uno de los grandes méritos de Rched a la hora de pintar: solo utiliza tres óleos (amarillo, rojo y azul).
https://www.instagram.com/p/Bm9r4E-n6rL/?hl=es-la&taken-by=cinthiarched
“Con apenas los tres colores primarios, el blanco, eventualmente el negro, Cinthia Rched despliega un virtuoso, energético ejercicio virtuoso”, explica el artista. Sin embargo, ella tiene una forma más simple de definirlo: son los tres “dioses” del color.
El haber desarrollado la capacidad de crear un mundo a partir de tres colores constituye de un mérito aparte, que excede a su talento a la hora de pintar (también inmenso). Cinthia, con humildad, habla de una “habilidad técnica”, que nació a partir de las circunstancias.
¿Por qué, entonces, cargar con nada más que tres colores? Comodidad. Si bien trabaja en un taller, se trata de una artista que prefiere plasmar con su talento paisajes en directo. Además, tiene Displasia Espóndilo Epifisaria Múltiple, una enfermedad ósea, que la acompaña desde que nació que sólo la condiciona a la hora de llevar cargas.
Pero Cinthia no habla de su enfermedad ya que no es un impedimento. Hace arte en cualquier lugar “donde pueda sentarse y haya un poco de sombra”.
https://www.instagram.com/p/Bmd3oR2nGfa/?hl=es-la&taken-by=cinthiarched
Una parte de su obra hace referencia a un período de su vida en el que tuvo que atravesar varias operaciones y se autorretrató en la cama del quirófano.
Cuando habla de estas pinturas, Cinthia dice que buscó lo “íntimo”: “Que las pinceladas y las líneas sean como los cortes ya cicatrizados de mi cuerpo, pero no en mi mente. Las líneas son el dolor y la fuerza interior. con cada obra voy cicatrizando”, define.
Sin embargo, luego llega la alegría: flores, paisajes y viajes por el mundo. Entonces, vemos “lapachitos” de su Chaco natal, playas brasileñas, el Machu Pichu, rincones europeos. Ha viajado sola y acompañada, pero con poco equipaje y espacio para traer arte en la valija.
https://www.instagram.com/p/Bh6hyfVA2Iy/?hl=es-la&taken-by=cinthiarched
En algunas de las obras que forman parte de las vidrieras de la muestra, hay otro detalle, producto de la “poca carga” a la hora de moverse por el mundo en busca de inspiración: Cinthia forma los colores en la misma superficie en la que elabora la pintura, no tiene una paleta aparte. Si bien este hábito surge de la practicidad, termina siendo un elemento interesante en las obras, que revela un poco el cómo de la elaboración de sus colores. Siempre a partir de los primarios.
***
Datos útiles
Muestra “A cuerpo abierto” de Cinthia Rched
Dónde: Pabellón de las Bellas Artes. Edificio San José. Pontificia Universidad Católica Argentina. Alicia M. de Justo 1600, PB. Puerto Madero-Buenos Aires.
Entrada libre y gratuita
Más información clic aquí