Vélez Sarsfield es sinónimo de inferiores: hoy, 24 de los 35 jugadores del plantel profesional provienen del fútbol juvenil. El récord del campeón del mundo de la mano de Carlos Bianchi en 1994. La palabra de los protagonistas.
La fábrica es la cantera del Club Atlético Vélez Sarsfield, donde se producen jugadores de fútbol profesional. Un dato: de los 35 jugadores que hoy componen el plantel profesional de Vélez, 24 provienen del fútbol juvenil. Y casi la mitad de ellos, 10 se formaron en el fútbol infantil del Club.
“Las inferiores son todo”, sintetiza Marcelo Bravo, director técnico de la 4a. división. Con apenas 20 años y el título de campeón del Clausura 2005, Bravo debió abandonar su sueño de continuar jugando al fútbol. Una hipertrofia cardiovascular puso fin a la carrera del volante ofensivo. Pero eso no le impidió pisar fuerte en el césped del Fortín.
La mención a Marcelo Bravo no es casual. Álvaro Barreal, una joya de 18 años que ya debutó en la selección juvenil y empieza a sumar minutos en primera, lo destaca como uno de los técnicos que marcó su paso por las inferiores.
“Vélez apuesta al fútbol juvenil porque hay un excelente staff de captación y cuerpos técnicos. En la fábrica está la materia prima del Club”, afirma Bravo.
Según Diego Guitián, periodista partidario que sigue la campaña de las inferiores, “hay varios factores que determinan que un jugador prefiera a Vélez por sobre otros clubes a la hora de formarse como profesional”.
Este es un club que proyecta muchos juveniles a la máxima categoría, agregó Guitián.
En busca del futuro
En los últimos nueve años, 68 juveniles debutaron en primera, 27 fueron detectados por el área de Scouting y residentes de la Pensión del Club. Lautaro Giannetti, Braian Cufré, Lucas Robertone o Matías Vargas, por citar algunos casos.
A lo largo y a lo ancho del país, el Departamento de Scouting, dirigido por Hermes Campos, se dedica a detectar jugadores para sumarse al fútbol infanto juvenil de Vélez, se informa en el sitio oficial.
“En Vélez sabés que si jugás bien y sos constante podés llegar a primera”, sostiene Barreal, que lleva el número 31 en su espalda.
“El paso por inferiores es difícil pero lindo. Lo fundamental es esforzarse y tener paciencia”, expresa el volante ofensivo, una promesa de Vélez.
Álvaro Barreal llegó a Vélez Sarsfield a los siete años, de la mano de Eduardo Pino Hernández, coordinador del baby fútbol del club Villa Real, donde jugaba.
Debido a su baja estatura y peso liviano Barreal no pudo jugar en 9a. ni en 8a. categorías pero nunca bajó los brazos. Asegura que “gracias a la dedicación y el apoyo de Vélez” pudo llegar a lo más alto.
“Alcanzar la Primera en este Club es muy especial porque me vieron nacer, acá me dieron todo. Gracias a Vélez tuve la posibilidad de llegar a la Selección y jugar con la camiseta de la Argentina.”
Barreal.
Barreal representó al país en el Torneo COTIF 2018 en España y marcó dos goles en cinco partidos. La Argentina obtuvo el torneo.
Admirador del “Monito” Vargas y de Nicolás Domínguez, Barreal asevera que en su categoría (2000) hay muchos jugadores con potencial para estar en Primera División.
¿Cómo funciona la pensión velezana?
De vital importancia en la vida del club, la pensión se ubica debajo de la platea Sur. Abarca 695 metros cuadrados divididos en 12 habitaciones, dos salas de estar y un puesto de seguridad.
Alberga a 36 jugadores que generalmente provienen del interior del país. Por allí pasaron, del actual plantel, Matías Vargas (originario de Mendoza), Lucas Robertone (Entre Ríos) y Braian Cufré (Mar del Plata), entre otros.
Muchos de los que viven en la pensión llegan en el último año de infantiles y completan su estadía al llegar a la 5a. división cuando el club les solicita que busquen alojamiento fuera de la pensión.
“Desayunan, almuerzan, meriendan y comen en la confitería del club. Tienen apoyo escolar y psicológico y dos personas que los cuidan todo el día, que van rotando”, comenta Pedro Larraquy, ex figura de Vélez y actual Secretario Técnico de Fútbol Amateur. Agrega: “Realmente hay un equipo muy grande al cuidado de los chicos de la pensión en particular y de todo el fútbol infanto juvenil en general”.
Recién salidos de la Fábrica
A sus 15 años, Alexis Oviedo, Matías Soule, Elías Cabrera, Isaías Andrada y Máximo Perrone, jugadores de la 7a. división, pisaron el césped del Amalfitani por primera vez con la V en el pecho: fueron ovacionados en el entretiempo del partido Vélez-Colón por haber integrado la Selección Sub16 campeona del Torneo de Desenvolvimiento que organizó la UEFA, en Portugal, entre el 7 y el 11 de febrero últimos.
“En cada una de sus 16 estrellas, siempre hubo uno (o varios) jugadores nacidos en la fábrica que fueron determinantes para la conquista de algún título”, asegura Diego Guitián.
Vélez es el único club campeón del mundo que en su once titular tenía siete jugadores de inferiores. El técnico fue otra joya nacida y criada en Liniers: Carlos Bianchi. El Virrey surgió de la cantera del Club y es su goleador histórico con 206 goles.
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Primer puesto en 2018
Orgullo intacto. El futuro está llegando. Campeones con ADN fortinero. Podio y van por más. Gana, gusta y golea. Campeones en Balcarce. Avanzan a puro gol.
Estos son algunos de los títulos de las notas que nutren la página de la fábrica en el sitio oficial de Vélez Sarsfield.
“La fábrica y su producción continua. Calidad y cantidad de jugadores formados en casa nunca faltan en la vida futbolística de Vélez Sarsfield. Y este año volvió a quedar demostrado. No solo por los debuts en la máxima categoría que promovió Gabriel Heinze, sino también por la exquisita materia prima que abajo se está formando de la mano de un gran plantel de profesionales”, dice el sitio oficial.
Las inferiores se quedaron con el primer puesto de la Tabla General de la Superliga Juvenil 2018, donde dos divisiones (6a. y 8a.) se clasificaron finalistas y otras dos quedaron segundas y terceras en su zona (5a. y 9a.Novena).
