El roda polo, el nuevo deporte es furor entre los chicos y no para de crecer, se presenta como una alternativa más segura y económica al polo tradicional.
“Agarrá la rueda y nos juntamos en la canchita.” Así se organiza este deporte que gana popularidad en los circuitos de Argentina donde tiene fuerte presencia el polo tradicional para adultos.
El roda polo combina polo y tecnología en una propuesta accesible y sencilla, nacida de una idea de los hijos de reconocidos polistas. Su objetivo es atraer a jugadores de todas las edades que quieran divertirse y probar algo nuevo.
La idea del roda polo surgió hace unos cinco años, antes de la pandemia, de los hijos de polistas argentinos que vivían en Estados Unidos: Adolfo y Mia Cambiaso, y Bartolomé y Camilo Castagnola.
Los jóvenes compraron ruedas eléctricas —usadas originalmente para movilidad urbana— y comenzaron a jugar. Este monociclo se controla con el movimiento del cuerpo: si el jugador se inclina hacia adelante, la rueda avanza en esa dirección.
“Lo mejor que tiene este deporte es que fue inventado por niños”, destacó Javier Tanoira, fundador del All Pro Polo League y uno de los principales impulsores del proyecto.
El deporte atrae a muchos niños y adolescentes. Durante la pandemia, cuando las clases virtuales redujeron la socialización, los chicos encontraron en el roda polo una forma de reencontrarse al aire libre. “Van a las plazas o a canchas de fútbol y se juntan a jugar. Antes estaban con la play o el Instagram; ahora llegan y socializan”, contó Tanoira.
Según plantea, el principal desafío es sumar a personas que no provienen del polo tradicional. “La rueda iguala las condiciones —explicó—. Con práctica y ritmo, cualquiera puede alcanzar el nivel de los hijos de polistas que tienen los mejores caballos”.
Diferencias en el reglamento
El roda polo mantiene la esencia del polo tradicional, aunque con varias adaptaciones:
- En lugar de cuatro jugadores por equipo, hay tres.
- El taco puede usarse con ambas manos (en el polo solo con la derecha).
- Se juega con zapatillas en lugar de botas de polo.
- Hay un juez dentro y otro fuera de la cancha, y no se utilizan barrilleros.
- La cancha mide 155 x 85 metros (similar a una de fútbol) y está rodeada por una red, mientras que la del polo es más grande y tiene tablas de madera.
- Se utiliza una pelota de tenis —o de fútbol, en niveles iniciales— en lugar de la bocha tradicional.

Los partidos duran entre 15 y 30 minutos, frente a los 36-48 minutos del polo tradicional. Además, el reglamento del roda polo es más flexible: algunas jugadas consideradas falta en el polo, como cruzar el taco por delante de un rival, están permitidas aquí. Al no involucrar animales ni grandes velocidades, el riesgo disminuye notablemente.
¿Más seguro o más riesgoso?
El polo siempre fue considerado un deporte de riesgo por la velocidad de los caballos y la dependencia del equilibrio del jinete. Pero ¿ocurre lo mismo con el roda polo?
Las opiniones son diversas. Fermín Prado, polista adolescente, cree que es menos peligroso: “Cuando aprendés a manejar la rueda, te sentís seguro; con el caballo es distinto”. En cambio, Simón García Guerra, jugador de polo y roda polo, opina lo contrario: “El roda polo se juega a mucha velocidad, hay más chances de caerse”.

Tanoira aclaró que, aunque hasta ahora no hubo accidentes graves, sigue siendo una actividad de riesgo. “Mal usada, la rueda puede ser peligrosa”, advirtió.
Una versión más económica del polo
El polo es considerado el segundo deporte más caro del mundo, después del golf. “Comenzar a practicarlo puede costar unos $8.000.000”, explicó Santiago García Guerra, padre de polistas. Esto se debe a que se requieren caballos (hasta ocho por partido), monturas, botas, petiseros y otros accesorios.
El roda polo, en cambio, ronda los $2.000.000 para comenzar. La rueda —la “ewheel”— es el elemento más costoso, pero solo se necesita una, y puede durar años. Además, los jugadores deben contar con casco, polainas, anteojos y taco, los mismos elementos que en el polo.

Ambos deportes comparten una ventaja: muchos artículos se compran una sola vez. La diferencia principal está en el costo de mantenimiento: los caballos requieren cuidados constantes, mientras que la rueda solo necesita recarga y mantenimiento básico.
Torneos y futuro del deporte
El roda polo avanza también en el ámbito escolar. El 7 de mayo de 2022 se disputó el primer torneo oficial en la sede de la Asociación Argentina de Polo en Pilar. Participaron 135 jugadores en 45 equipos, divididos por edad y nivel. Algunos colegios, como el San Jorge de Los Polvorines, evalúan incorporarlo como actividad extracurricular o en educación física.
Según Juan Manuel Echeverez, director deportivo de torneos, “el objetivo es que el deporte crezca y se consolide, alimentando al polo tradicional”. Adelantó que planean un torneo sudamericano y, a futuro, un mundial. “Los chicos que hoy juegan van a seguir haciéndolo a los 40 años”, aseguró.
Tanoira también tiene una mirada global: “Nos contactan desde distintos países para saber cómo incorporar el deporte. Queremos un reglamento unificado para facilitar competencias internacionales”.
Un futuro sobre ruedas
En un mundo cada vez más tecnológico, el roda polo combina innovación, deporte y socialización. No busca reemplazar al polo tradicional, sino complementarlo. Como resume Tanoira: “La ewheel va a acercar muchísima gente al mundo del polo. Ver este deporte jugado por buenos jugadores es muy entretenido”.
Con esa meta, polistas y creadores esperan que esta disciplina siga creciendo, acercando a chicos y grandes al espíritu del polo, pero sobre ruedas.