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Jóvenes en la política: historias de militantes que quieren cambiar al país

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Lucio Vera, Federico Fagioli y Gisel Mahmud militan en distintas fuerzas políticas. Cuando la pasión y la convicción se unen para tratar de mejorar la realidad de la Argentina.

El 11 agosto se celebrarán las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) para elegir, entre los precandidatos a presidente, quienes quedarán en la contienda electoral de octubre.

Las distintas fuerzas políticas saben que hay que salir a conquistar el voto de los más jóvenes: desde el 2013, los chicos de 16 años tienen la posibilidad de participar en el sufragio y, según el Registro Nacional de las Personas (Renaper), este año, se incorporaron al padrón electoral un millón y medio de nuevos electores, muchos de ellos jóvenes.

Para llegar a este sector, detrás de toda campaña política, se erige una red de personas comprometidas con un candidato: los jóvenes militantes políticos.

Punto Convergente dialogó con tres militantes de distintas fuerzas que reflexionaron sobre su convicción política, los retos en la juventud de sus partidos y la actualidad del país.

Lucio Vera

Lucio, en una reunión de Comité ante la mirada de la diputada Sandra París.

“La UCR ya se expidió. El partido orgánico ratificó su pertenencia a Cambiemos y posturas como la de Ricardo Alfonsín demostraron que no tienen expresión en el partido”, dice Lucio Vera, de 22 años que milita en el radicalismo.

La Unión Cívica Radical es uno de los partidos políticos con más historia del país y el único centenario en vigencia, camino a cumplir 128 años el próximo 26 de junio. En 2015 logró aliarse con el PRO y la Coalición Cívica para formar Cambiemos. Tras casi cuatro años de alianza, muchos pusieron en duda el futuro del radicalismo pero en la última convención decidieron no romper la alianza.

Lucio nació en Zárate, pero al día de hoy vive en la ciudad de La Plata. Durante su adolescencia, la historia de los partidos políticos lo inquietó y cuando cumplió 18 decidió afiliarse a la UCR.

“Mi tío abuelo es afiliado radical, y desde mi juventud hablamos de política y siempre teníamos intercambios generacionales. Pero sus anécdotas me despertaron amor por el partido. También mi madre en la primavera democrática con el ascenso de Raúl Alfonsín sintió un renacer democrático que me transmitió”, dice el joven.

La socialdemocracia de Alfonsín es el modelo político que más le gusta para el país, pero a su vez destaca el primer gobierno de Yrigoyen y las reivindicaciones de Illia en materia de salud y educación. “Estos son los pilares que más me representan de este gran partido”

“Siempre adelante radicales, adelante sin cesar; nuestra vida le daremos al partido radical”, dice la marcha radical y así lo entiende Lucio. “Me enamore del partido, nuestra estructura centenaria tiene la mística de siempre seguir para adelante con una actitud positiva, pensando para adelante”, cuenta.

Lucio trabaja con la diputada provincial Sandra París en La Plata, pero la vida universitaria lo llena cada día en el debate con otros correligionarios: “Te encontrás con correligionarios y te empapás con la realidad de cada distrito. Hacemos un paneo general sobre sucesos que ocurren y cómo es diferente en cada distrito”.

En la provincia, la militancia de la juventud orgánica radical está representada por una facción interna que es la “Juventud Radical en lucha”. Esta línea reivindica a Sergio “Ruso” Karakachoff, un abogado desaparecido durante la última dictadura militar. La facción tiene un amplio despliegue en la provincia: está en los 8 distritos y se proponen objetivos a largo plazo.

Sobre la gestión macrista, Lucio afirma que “son conscientes que hay problemas estructurales sin resolver” y considera que “la economía” es uno de ellos. “Reivindicamos importantes obras pensadas para el futuro de país que ya se hicieron, como ampliación de caminos en rutas, hospitales, mejoras en escuelas y jardines”, afirma Lucio y agrega que “no es casual el combate contra el narcotráfico y sindicalistas corruptos que no permiten el crecimiento del país”.

“La fórmula presidencial no es mi tema -aclara Lucio-. Ojalá que haya un radical acompañando a Macri pero ratifico la resolución de la Convención y la linea de Daniel Salvador en provincia”.

Lucio espera militar con pasión y convicción este año, pero sobre todo con ganas de ayudar al otro. Son los principales valores que le dejó el partido.

Federico Fagioli

Federico en un acto político del Frente Patria Grande.

Desde hace pocos meses, el kirchnerismo incorporó a su espacio una fuerza política novedosa: el Frente Patria Grande (FPG), liderado por el dirigente social Juan Grabois.

El FPG está formado por jóvenes militantes ajenos a los partidos tradicionales del país, pero con un objetivo en común: proponer un proyecto político a favor de las mayorías y la gente común.

Dentro del Frente Patria Grande, está integrado el Movimiento Popular La dignidad, una corriente de la izquierda popular. Aquí milita Federico Fagioli, de 28 años, con una vocación firme en trabajar por los sectores más postergados de la sociedad.

Nació en Quilmes, pero vivió casi toda su infancia en Río Negro porque sus padres tuvieron que mudarse por trabajo. Cuando cumplió los 16 años regresaron a Buenos Aires y así fue comenzando su interés por la política. “Me crié en el entorno de una familia popular: con una madre docente sola y tres hijos por cuidar, fue siempre complicado para ella porque ganaba dos pesos con cincuenta”, comenta Federico.

Al día de hoy, Federico vive en Almirante Brown, cerca de Glew. “Tengo mi casa en un barrio postergado formado hace 5 o 6 años. Siempre viví en barrios populares o sectores vulnerables”. A lo largo de la provincia de Buenos Aires, trabajó en el Movimiento Teresa Rodriguez donde colaboró en la construcción de viviendas, bachilleratos, espacios populares y comedores.  “En ese tiempo surgían Cooperativas de trabajo para hacer este tipo de actividades. Hoy estoy dedicado de lleno a la economía popular por la situación del país”, dice el joven.

“Tierra, techo y trabajo” es uno de los programas fundamentales del Frente Patria Grande: “Techo porque nadie puede estar sin acceder a una casa, alquileres y créditos accesibles a una vivienda. El Estado debe generar créditos para la construcción y expropiación de barrios”. Federico afirma que la tierra es para vivir y trabajarla, en un marco de pensamiento en los pequeños productores: “hay gente que alquila la tierra pero necesitamos que sean dueños”. El trabajador debe producir barato y lo producido debe llegar barato al trabajador.

Durante los 12 años de gobierno kirchnerista, Federico entiende que se lograron avances importantes en conquista de derechos para su sector pero no se llegó a saldar todas las necesidades del pueblo en conjunto.

“Entendemos que fue un proceso de avance y crecimiento para la patria grande y región. Proponemos aportar a este gobierno popular cosas que quizás faltaron: una visión más cercana a sectores populares y marginados, que están siendo excluidos de la patria”, aclara.

Federico coincide con Juan Grabois en el marcado repudio a ex funcionarios que llevaron adelante hechos corruptos: “Cristina (Kirchner) no es así, ella no está involucrada en este tipo de acusaciones. Fueron estos funcionarios corruptos quienes perjudicaron en el fondo a sectores populares porque no se destinó la plata a lo que se debía”.

Sobre la juventud de su espacio dice que debe ser protagonista. La política debe hacer “una reorientación hacia la juventud”, en miras de renovarse no sólo con jóvenes sino que “haciendo presente la voz de los sectores más humildes”, sostiene.

Y agrega: “La juventud está contenida en el proyecto de Cristina, por eso los más jóvenes siguen este proceso”.

Gisel Mahmud

Gisel Mahmud en una de las marchas de #NiUnaMenos

En la provincia de Santa Fe, el Partido Socialista se jugará su vigencia el próximo 16 de junio. Desde el 2007, los sucesivos mandatos de Hermes Binner (2007-11), Antonio Bonfatti (2011-15) y Miguel Lifschitz (2015-19) dieron un posicionamiento histórico al socialismo en la provincia santafesina. Si bien la lista de Bonfatti ganó las PASO, su vuelta a la gobernación se ve amenazada por el PJ, al ser la fuerza de más caudal de votos en las PASO teniendo en cuenta la interna Perotti-Bielsa.

El Movimiento Nacional Reformista es el brazo universitario del Partido Socialista históricamente. Tiene su génesis en la reforma universitaria de 1918 en la que se exigió democratización y mayor proyección juvenil al entonces presidente Yrigoyen. Gisel Mahmud es una joven que, con 28 años, ocupa la secretaría nacional de esta fuerza política importante en las universidades de Santa Fe y Córdoba.

En un año Gisel espera recibirse de abogada en la Universidad Nacional del Litoral de Santa Fe. Pero su militancia le da energías para participar en las problemáticas de la universidad: “Recuerdo que me involucre por primera vez en el MNR cuando nuestro comedor universitario contaba con ineficiencias en la atención. Desde la agrupación presentaron un proyecto sobre el tema que me interesó y llevó a la participación”.

“En el socialismo me gustó que sea una fuerza política honesta. Después de 12 años de gobierno socialista, Santa Fe demuestra ser la provincia más honesta del país”, dice Gisel, valores con los que se siente identificada desde su adolescencia.

“En materia de salud y educación somos distintos. La matrículas de finalización de secundaria y carreras terciarias son altas en Santa Fe. El medio boleto universitario es otro logro que se suma a la creación de hospitales, algo que nos hace una provincia modelo en salud”, enumera la militante y también, menciona a Alicia Moreau como su principal referente en derechos sociales, políticos y laborales. “Es Alicia Moreau, el <de Justo> está de más, tenemos que cambiar eso”, bromea Gisel.

Sobre las recurrentes acusaciones de “narcosocialismo” que ha recibido su espacio afirma que “es bastante común y recurrente”. “Durante el kirchnerismo sufrimos un ataque sistemático contra nosotros por estas acusaciones y lamentablemente se agrandó con campañas mediáticas”, afirma y dice que, a pesar de las acusaciones, no hay pruebas de involucramiento del gobierno santafesino.

“En el mandato de Bonfatti se iniciaron las causas judiciales. Las investigaciones sobre funcionarios y policías no lograron probar nada”, sostiene.

Gisel afirma que los fondos de coparticipación correspondientes no llegaban a su provincia y por esta deuda del Estado fue dificultoso trabajar; “El narcotráfico es un delito federal y por lo tanto debe participar el gobierno nacional también. La provincia desbarató importantes bandas de narcos y esto llevó a que balearan la casa de Bonfatti en su momento. Es necesaria una política en conjunto porque la droga no nace en Santa Fe”.

Entre las principales inquietudes de la juventud socialista tras cuatro años de macrismo, Gisel menciona la influencia de la situación económica en las condiciones de trabajo y problemáticas comunes de los universitarios. “Los jóvenes se involucran cuando sienten el menú del comedor y los apuntes muy caros”, señala Gisel, y reconoce lo caro que es sostener una carrera universitaria: “Son importantes los salarios docentes pero el gobierno de Mauricio Macri no asigna los recursos necesarios”.

En cuanto a la participación de los los jóvenes en la política, Gisel entiende que pueden ser los protagonistas del hoy, pero también que tienen poca incidencia en la mesa chica de cada partido.

“Existe una nueva generación que hace política de una forma más crítica que nuestra dirigencia. Jóvenes de distintos espacios logramos debatir sobre aborto y educación pública. Esto es difícil de ver en la dirigencia adulta, les cuesta construir consensos pero a nosotros no, porque reconocemos los objetivos comunes que tenemos . Ya estamos moldeando una nueva forma de pensar la política, rompiendo esquemas tradicionales”, asevera.

De cara a la elección nacional, Gisel desde su fuerza política impulsa la candidatura de un tercer espacio para quienes no se sienten contenidos en la grieta.

“El GEN con Margarita Stolbizer y Lifschitz buscan fomentar una alternativa competitiva con Roberto Lavagna. Es una figura de gran experiencia en economía que nos puede sacar de nuevo de esta crisis”, afirma.

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